domingo, 12 de febrero de 2017

EL HOMBRE DE HOJALATA.

Hacía mucho ruido al andar. Eso me dijo ,pero yo lo cierto es que tan solo le escuché un momento.

Me reclamaba su atención , según él, pero es que ni me di cuenta de su presencia.

Tanta chapa clinclineando debió de producirme sordera temporal y ni caso hice al alboroto.

Pero hubo un momento que decidí girar la cabeza y allí estaba con su colador en la cabeza y los

remaches recorriendo todo su cuerpo.

- Hola ¿ llevas zapatos de rubí ? - me preguntó entusiasmado.

- No majo,no .Yo ando descalza .

- Ah , pues no me sirves para ser Dorothy,

- Puede que sirva más para bruja del Este o según vaya viendo igual soy la Maga de Oz,

que versiones del cuento puede haber cienes o miles, según observa la física cuántica o la teoría de cuerdas.

- Yo es que soy un canalla y no tengo corazón y estoy buscando a alguien que también me enseñe a

volar.

- Ah, pues yo tengo escoba ,  ya te dije lo de bruja o maga, según quieras.

El apuesto leñador...pescador o algo acabado en or...resulta que fue perdiendo poco a poco su

emoción existencial y se dejó llevar por la corriente de un pequeño arroyo que no le hacía vibrar.

Le dio por husmear y remover energías muy potentes pero nada imponentes.

Pues las que parten de abajo si no conectan con arriba hacen cortocircuito y rompen corazones y, las

mitocondrias celulares , ya de paso.

- Mira, las mariposas no existen, pero si la nutella. Cuando ellas vuelan a otro corazón , unta con

nutella cada momento de tú vida,  Hombre de Hojalata.

- Bruja, maga,diosa , valquiria....Dime  que no sé como llamarte.

- Quizás sea Karma , sólo Karma. Esa que sabe escuchar y que se encuentra y re-encuentra con

escollos que podrían ser preciosos desde la canallada más clandestina y amorosa.

O quizás sea realmente  Maga de Oz , porque yo si huelo tú corazón.











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